27 febrero 2009

Anotaciones sobre Kubrick

En todas las películas de Stanley Kubrick( 1928-1999) se observa este interés del director por los personajes obsesivos y patológicos dentro de la moral y ética de la cultura en la que se encuadran. Obsérvese el caso de Alex, el protagonista de Clockwork Orange. Además, los personajes suelen fracasar en climax de su triunfo anti-heroíco. Suelen vivir, un momento de esplendor, en el que aparentemente se convierten en los héroes, pero acaban cayendo debido a su ser.

Kubrick trata de señalar la imperfección de los mecanismos. Éstos, con una moral, unas normas, oprimen al individuo, dando lugar a casos de patología y a fracasos. Kubrick aborda el mundo desde un pesimismo absoluto, ya que ninguno de sus personajes, único hálito de esperanza de salir del sistema, se acaba por salvar.

De las películas que dirigió Kubrick, todas se basaron en una novela, excepto Fear and Desire y Killer's Kiss. Tal es el caso de Lolita, o de Clockwork Orange. A la hora de elegir una novela sobre la que basarse, Kubrick buscaba una en la que la vida interior de los personajes estuviera presente. Como él mismo confiesa: “La novela perfecta de la que se puede hacer una película es, creo, no la novela de acción, sino, por el contrario, la novela esencialmente preocupada por la vida interna de sus personajes”[ Kubrick, “Words and Movies” en Sight & Sound, Londres,invierno 1960-61. Citado por E. Riambau en Stanley Kubrick, op. cit., p.] .

Se puede ver, con esta frase, su interés por la interioridad de personajes cuya vida interior es diferente a lo normal.

Otro rasgo que caracteriza la manera de hacer cine en Kubrick es su trato especial hacia los actores. Kubrick les da un guión sobre el que, en los ensayos, los actores pueden realizar aportaciones personales. Un ejemplo se da en Clockwork Orange, en la escena de la casa en la que apalean al escritor y a su mujer. Mientras Alex golpea al escritor canta la canción Singing in the rain. Ésta es una aportación del propio Malcolm McDowell. James Mason, intérprete de Humbert en Lolita dice: “Kubrick sugirió muy sensatamente que todos nosotros tratáramos de olvidar los diálogos que habíamos memorizado y que, estando totalmente al tanto del espíritu y contenido de cada secuencia, la expresáramos con nuestras propias palabras” [James Mason, Before I Forget. An Autobiography, Hamish Hamilton, Ltd., Londres, 1981. Citado por E. Riambau en Stanley Kubrick, op. cit., p. 93.].

Por último, señalaremos que Kubrick en todas sus películas no suele dar importancia al estilo de los títulos de crédito. No ocurre en él lo que en otros autores, como Hitchcock, que tratan de hacer ver, a través de los títulos de crédito, lo que va a ocurrir en la película. Lo que sí es importante para Kubrick es la primera escena. Ésta debe impactar al espectador, debe arrastrarlo hacia la historia, haciendo que quede interesado por ella desde el principio. Nótese en ClockWork Orange que la primera escena, la que se desarrolla en el Milkbar Korova, es notablemente impactante. La cámara parte de un primerísimo plano del rostro de Alex, y nos va mostrando, conforme se aleja, el decorado del bar, que anuncia cuál es el contenido ético y estético de la película. En el caso de Lolita, la primera escena acompaña a los títulos de crédito, y nos muestra la mano de un hombre pintando las uñas de los pies de una joven. Sólo con ese detalle podemos deducir que el contenido de la película va a ser fundamentalmente erótico.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Oe y ese texto de dónde lo sacastes ...?